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13 jul 2015

Final de SV 2015 – Rubén perdió y Fortu destrozó la final

Supervivientes 2015 ha terminado con una final un poco caótica. Como sabéis, ninguno de los cuatro últimos supervivientes eran mis favoritos, aunque antes que apoyar al “Clan Palmera” prefería la victoria de Nacho Vidal, pero lo que más deseaba era que Rubén no fuese quien se coronase como el mejor superviviente. Finalmente, el ganador fue Christopher, seguido de Nacho Vidal, en tercera posición se quedó Rubén y como último expulsado Rafi Camino.

La final fue caótica desde su comienzo, aunque más bien en el momento más crucial, los últimos minutos, fue cuando todo se vino a pique, en el punto en el que se debía dar un cierre magistral a una edición para recordar.

La gala empezó con ese momento helicóptero donde los concursantes aterrizan en Telecinco para conocer quién es el último expulsado de la edición. Para mí, lo ideal hubiese sido que quedase en cuarta posición Rubén, pero reconozco que era muy difícil que Rafi Camino, un concursante inexistente, pudiese vencerle, ya que aunque Rubén nos ha dado muy poco contenido, al menos le han llamado “Pistolo” porque a Rafi ni eso….  Aunque, sinceramente, la tercera posición de Rubén me parece tan triste... porque es mejor ser expulsado por haberte implicado en el reality, incluso posicionando al público en tu contra, que llegar a la final de rebote y no despertar ningún tipo de interés en la audiencia para votarte. Quiera o no quiera, Rubén siempre será “Pistolo” para los espectadores, pues no se lo han llamado una vez, sino que ayer el hermano pequeño de Christopher se lo gritaba en la cara diciendo que había sido el mejor momento de la edición… Que se lo tome con el sentido del humor que dice tener y se sienta orgulloso de haber protagonizado ese momento memorable, ya que es su único minuto de gloria en tres meses de concurso. Enhorabuena, Rubén.

Siguiendo con el desarrollo de la gala, hay que reconocer que Christopher dio el resto en las pruebas, y aunque fue duramente criticada la prueba de los collares pero lo ganó todo. Yo no quería que Christopher ganase el concurso, no porque no me haya gustado, la verdad es que poco puedo reprocharle porque me ha sorprendido como superviviente y yo pensaba que después de unas semanas de concurso se vendría abajo y pediría su expulsión a los espectadores, pero se enfrentaba a Nacho Vidal, otro gran superviviente, y si comparamos el espectáculo televisivo que nos han dado cada uno de ellos, Nacho vence a Christopher por goleada. Christopher se acomodó a jugar detrás de las cámaras para salir a la luz en los momentos más oportunos, de forma que no manchó mucho su imagen y el juego lo hizo a espaldas de los espectadores, junto a Rubén y Rafi, por ello yo no le hubiese dado el maletín, aunque tiene mi enhorabuena porque ha sido un gran superviviente. Creo que más que premiarlo a él, ha sido un castigo de los detractores de Nacho, que no deseaban su victoria.

Uno de los momentos más bochornosos que yo recuerdo en la historia de los realities es la actuación de Fortu, tanto la musical, a escasos minutos de dar la gala por concluida, como su comportamiento de reventado.

A Fortu le hervía la sangre por estar sentado en el banquillo de los expulsados, en vez de luchando la gran final. Sigue sin asumir su derrota y tuvo una actitud muy chulesca e irrespetuosa, desmerecía el concurso de Nacho, cuando Fortu sin él no habría llegado tan lejos; le culpaba del tema de las prostitutas de Colombia, cuando quien hizo la broma y quien decidió sacarla en directo, en La Palapa, fue el propio Fortu; y, aunque no lo vimos, tuvo un enfrentamiento muy desagradable con Isabel Rábago, del que probablemente no tenía ninguna razón por la actitud de apoyo que demostró el público en plató a la periodista.

Respecto a su actuación musical, me pareció absolutamente fuera de lugar e irrespetuosa. Creo que podrían haber hecho esta actuación en El Debate final porque no era su momento, sino el de los finalistas, y él la aprovechó para cantar una canción que enviaba un mensaje a sus compañeros y a los espectadores totalmente ofensivo, que recalcaba con gestos y miradas soeces e inoportunas que estropearon uno de los momentos más bonitos de un reality.

Lo único que se consiguió con la actuación de Fortu fue crear mal ambiente, estropear la final y robar el tiempo al veredicto, teniendo que hacerlo de forma apresurada, sin ninguna tensión y con una celebración muy cutre. Se cortó la emisión de la gala en el momento más importante, sin despedirla, sin palabras del ganador, ni del segundo finalista, quien no tuvo su vídeo de los mejores momentos para reconocerle su brillante paso por el concurso porque parecía más importante que Fortu actuase en directo… lamentable, él tuvo su minuto de gloria, en el que destrozó, más si cabe, su paso por el concurso y los espectadores nos quedamos sin un cierre de edición como nos merecemos.

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