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23 oct 2015

Gala 7 de GH 16 - Repesca a la vista

Maite, Muti, Raquel y Quique han vuelto a Guadalix, para someterse a un proceso de repesca donde uno, o ninguno, se convertirá, nuevamente, en concursante oficial de Gran Hermano 16. Ésta no fue la única incorporación de la noche, Ricky, un argentino que reside en Canarias llegó para quedarse. Finalmente, tras la expulsión de Ivy, los nuevos nominados son Carolina, Niedziela y Vera.

Mucho se estaba pidiendo esta repesca que se ha puesto en marcha. En Twitter veíamos, continuamente, subir a los TT diferentes hashtags que solicitaban la vuelta de un expulsado a la casa. Yo siempre he defendido la repesca, el dar segundas oportunidades, el dárnoslas nosotros mismos como espectadores, y poder disfrutar de un juego que quizás se precipitó por la expulsión de un nominado que pudo enfrentarse a unos rivales importantes en la palestra. No es pronto, de hecho, creo que retrasar en el tiempo este proceso hace entrar a los repescados en la casa con más información de la cuenta y con el concurso en un punto en el que podría ser injusta su incorporación.

Se me antoja la vuelta de dos de los expulsados, Maite y Quique, ella elegida por el público (y, siempre, “Elegida de Dios”), y él por sus ex compañeros. En seis ediciones se ha abierto un proceso de repesca y sólo en las dos primeras, GH 9 y GH 10, regresó un sólo expulsado a la casa, Amor Romeira y Ana Toro, respectivamente. En GH 11 y GH 14, uno de los repescados fue elegido por sus ex compañeros, Pilarita Gómez y Juan Carlos Sánchez. Y en las dos ediciones no mencionadas, GH 12 y GH 12+1, regresaron dos ex concursantes elegidos por el público, teniendo que ser, en GH 12+1, una decisión aprobada por la mayor parte de los participantes que continuaban en el juego. Así que no estoy pidiendo algo que aún no se haya hecho en la historia de Gran Hermano, pero por lo que explicó Mercedes Milá parece que volvemos a los orígenes de la repesca, con un solo regreso a la casa, elegido por el público, o al menos así lo entendí yo. Pero por pedir que no quede.

Sinceramente, la repesca que me parece más necesaria es la de Quique. Creo que se precipitó su salida por un error de juego, por querer adelantar un enfrentamiento con el antagonista de la edición, Suso, sin antes vencerlo en la convivencia. Quienes han catalogado a Quique como un mueble simplemente no han sabido valorarlo como concursante. No han sabido desgranar su juego, su estrategia, y cómo nos pone a nosotros, a los espectadores, a analizar el concurso de forma más minuciosa e inteligente. Quiero que regrese el juego a Gran Hermano y dejarnos de historias obvias.

De todas formas, siendo realista, si sólo uno tendrá la oportunidad de volver al programa y está decisión está en nuestras manos, creo que la disputa va a estar entre Maite y Raquel. Entre ellas no tengo ninguna duda en que prefiero volver a ver a Maite dentro de la casa, aquella mujer que consiguió hacer uno de los mejores arranques en una edición de Gran Hermano, capaz de romper los esquemas a los de dentro y a los de fuera, capaz de convertirse en protagonista. No le auguro una estancia larga en la casa, si consigue regresar, pero al menos reactivará tramas apagadas e introducirá un movimiento necesario. Mercedes Milá decía hace pocos días en una entrevista que a los concursantes de esta edición les falta riesgo y valentía, y estoy absolutamente de acuerdo. Esto puede introducirlo Maite.

De lo contrario la repescada será Raquel. Os aseguro que prefiero ver volver a la casa a Muti, que explicaba en una entrevista que le hice hace unos días que de estar en la casa tendría algo con Sofía (puedes leerla pinchando aquí), o incluso que ninguno vuelva a ser concursante, antes que apostar por la vuelta de Raquel, una de las participantes que más teatro ha hecho dentro de esa casa, y que, por supuesto, si vuelve, seguirá haciéndolo. Para mí tiene cero credibilidad y lo que busco en Gran Hermano es autenticidad.

Y hablando de incorporaciones, ayer un nuevo concursante se sumaba a la convivencia, Ricky. Entra con el secreto de hacer creer al grupo que hay otra casa, en la que ha estado conviviendo con otros aspirantes a concursante, entre los que sólo uno de ellos decidiría la audiencia añadir al juego real. Lo único cierto es que hay otra casa, más bien apartamento, en el que están viviendo los repescados, a los que tendrá que visitar a diario entrando y saliendo del armario, para contarles los últimos acontecimientos de la casa. Si lo descubren perderá sus tres puntos en las nominaciones, pero no mencionaron nada sobre si es él quién se va de la lengua. Lo justo sería que perdiese la parte proporcional a 100.000€, del premio final que él podría llevarse en caso de ganar el programa.

Ricky entra con mucha información del exterior, se nota que la tiene y que la va a utilizar, probablemente mal, porque ya me produce rechazo ver su comportamiento, y apenas lleva unas horas. Conoce perfectamente los nombres de los concursantes, ni siquiera titubea al llamarlos, cuando sería lo más normal si tiene que fingir haber estado en otra casa, aislado. Además, no dudó en meterse en la cocina y acercarse a Han, bromar con él y con Sofía, grandes favoritos de la edición. No me gusta precipitarme en hacer juicios rápidos, me alegraría que esta primera impresión cambiase y estemos ante un gran concursante, pero me temo que es un rival para Suso, en lo que se refiere a posible protagonista de carpetas poco reales y al poco instinto de jugador.

Esta semana, el invitado a la casa ha sido el mago Jorge Blass, quien además de traer la inmunidad, que ganó Marina, traía una caja misteriosa que quién consiga abrir se convertirá en finalista. Me gustaría decir que no me gusta cuando las normas no son claras. Cada semana se le llama “inmunidad” al objeto que se oculta en la casa pero nunca tiene el mismo significado. A veces consta de no poder ser nominados, de vez en cuando es un poder que se puede transferir y otras veces permite sacar a un nominado de la lista. Ayer, Suso y Carlos, preguntaban al Súper si podían nominar a Marina con mucho acierto, recibiendo una respuesta un tanto irónica, como dando a entender que era obvio que no, porque había ganado la inmunidad, pero otras semanas sí han podido, puesto que el poder era salvar a un nominado. Las normas tienen que ser claras y estar asentadas antes de jugar, sobre todo de cara al público. Otro problema con las normas lo tuvieron con la caja misteriosa, pues dijeron que si algún compañero la rompía ninguno se convertiría en finalista. De esto, después de que Suso la rompiese, hay que sobreentender que no podían romperla intencionadamente, pero sí en su manipulación, siendo en este último caso sustituida por una nueva. Sólo pido algo que no creo que tuviese que ser necesario pedir: Las normas del juego deben estar claras antes de jugar.

Y como hoy me he extendido mucho, os hablo rápidamente de los nominados de esta semana (pinchando aquí podéis ver la distribución de puntos). Los concursantes que están en riesgo de expulsión son Carolina, Niedziela y Vera.

Este año parece que voy luchando contra el mundo. Sé que la guerra está entre Carolina y Niedziela, y me mata. No entiendo que Vera vaya a estar salvándose semana tras semana por pasar desapercibido. Es el concursante más prescindible de la casa.

Carolina y Niedziela mueven la casa y se mueven ellas. Carolina despuntó como una jugadora importante desde el momento en el que ideó la estrategia fallida de nominar a Aritz, Han y Amanda que no fue capaz de sacar adelante, tiene a sus compañeros comiendo de su mano cuando se pone a hablar de espíritus, y sus movimientos de un bando a otro son dignos de análisis. Por otro lado, Niedziela, destaca como una de las malas oficiales de la edición. Repentinamente ha desaparecido esa niña dulce y coherente de las primeras semanas para mostrarse como una loba con piel de cordero, sibilina y acechando a sus presas para atacarlas sin que se den cuenta. Se acerca a todos como un corderito para extraer la información que necesita y los despelleja como una loba a sus espaldas. Puede caernos mal pero la necesito dentro, de momento. Hay mucho concurso por delante para castigar pero dejemos que las tramas avancen. Vera es el concursante que tiene que irse urgentemente del programa, él y Carlos, que no abandonó anoche después de la expulsión de Ivy, ni por amor ni por compasión a los espectadores.

Parece que nos queda por descubrir el último secreto de la edición, no sabemos cuándo, pero apuesto que será potente, tendrá que ver con el desarrollo de la mecánica y que se utilizará el apartamento. Puedo equivocarme. La semana que viene viviremos una de las noches más esperadas por todos nosotros, la del terror. Ya estoy deseando que llegue el jueves.

2 comentarios:

  1. La opción "ninguno" de la encuesta sobre la repesca falla. No registra los votos.

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    1. Sí los registra porque de momento hay 1 voto computado. Lo que pasa es que, a veces, no salen al instante, tarda en cargar un poco. ¡Gracias!

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